Esta tarta la entregaré dentro de unas horas a Virginia Oca, una ex-vecina de la calle a la que siempre hemos tenido mucho aprecio por todos los buenos momentos que pasamos en nuestra infancia cuando los niños podíamos estar en la calle hasta altas horas en los veranos calurosos. Virginia ha confiado en mí para sorprender a sus sobrinos y para que ellos la consideren una "tía guay" (espero lograrlo, aunque seguro que el mérito no será mío porque ya la considerarán como tal)
El proyecto de esta tarta se torció un poco, mientras todos veían el partido de España contra Irlanda, yo estaba en la cocina con mi delantal haciendo un bizcocho cuadrado para hacer el campo que tuve que tirar casi entero. Con las prisas se hizo otro bizcocho, esta vez redondo, pues el problema derivaba del recipiente anterior. Entre una cosa y otra hoy se me ocurrió hacer un balón y así quedó.
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| Los rellenos son muy fresquitos para estas fechas calurosas. Dos rellenos de nubes, uno de ellos ha sido una novedad, de frutas con crisco. |
Espero que mi gran amiga Virginia haya triunfado con esta tartita. Y seguro que sí, porque Miry es la "Reina de las Tartas"
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